jueves, 13 de marzo de 2008

La mujer del Cesar

Se acaba de publicar que la ex ministra de Sanidad, Dª Elena Salgado, subvencionó a la SemfyC durante el periodo de su mandato en 2007 con la módica cantidad de 476.000 € (unos 80 millones de las antiguas pesetas).

La justificación por parte de la Sociedad, del cúmulo de subvenciones a proyectos, que de puro viejos son ya leyenda ( el PAPPS por ejemplo), deja un sabor agridulce. Máximo cuando otras Sociedades no se han llevado nada.

Como dice el refrán que "la mujer del Cesar, no sólo debe ser honrada sino también parecerlo" esperemos que la transparencia en la forma en que se han gastado estas ayudas solventen cualquier duda. De esta forma se evitarán especulaciones sobre la libertad de expresión de una Sociedad referente en nuestro trabajo.


4 comentarios:

Juan Jose Bilbao Larrañaga dijo...

Esto le es propio a la Semfyc (sociedad enferma maloliente fétida y culera).
Lo que relatas tiene un antecedente vergonzoso en Andalucía cuando para parar la huelga de la plataforma 10 minutos, ofreció a la sociedad andaluza la publicación de unos cuantos miles de una publicación de esas que de vez en cuando realizan, a cambio de parar la huelga.
Fue contructivo y gratificante.
Quien no haya percibido todavía el valor real de la sociedad ¡la pasta! a cambio de puntos extarlus, está mirando para otro lado.
Como sigas con estos niveles de producción, va a ser dificil seguirte. ¡Respira!

Anónimo dijo...

Juan José, soy socio de la Semfyc y ... peinso como tu desde hace años por fin he decidido desvincularme de ellos, no se quien es peor, la administracion la supuesta sociedad cientifica, la industria o yo mismo por no haberles mandado a hacer puñetas hace tiempo...

Juan Jose Bilbao Larrañaga dijo...

Para Eduardo y el resto que opine de forma similar.
Quién cree en algo, una idea, lo hace siempre con la mejor intención, porque la mente de los normales, nunca funciona en "negativo".
Llegados al enfrentamiento con la realidad, la dificultad del desarrollo de la idea, percibimos que miles de impurezas contaminan la ilusión, pero todo ello no hace "mala" la idea. Lo que en realidad demuestra es que "bien hacer y bien pensar", desinteresadamente, como hacen la mayoría de la gente, es muy beneficioso para los "listos", que nos ven como ingenuos de los que aprobecharse.
Nosotros somos más, mejores, indestructibles y nos tenemos los unos a los otros, porque todos somos víctimas, somos los perdedores.
Todo esto, resumido, lo ves pasar a diario por delante de tu mesa.
Ni las víctimas, ni los perdedores somos nunca culpables de nada.

doctordiabetis dijo...

Impresionante...!!